La mejor parte de cómo sanar de una ruptura
La mejor parte de cómo sanar de una ruptura
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En esquema, el amor es un efectivo catalizador de cambio en nuestras vidas. No solo transforma nuestras relaciones personales, sino aún influye en nuestra forma de interactuar con el mundo y enfrentar los desafíos que se nos presentan.
Siempre que haya poco nuevo en tu vida, que sea diferente a tu experiencia preliminar, te puede producir un error, necesario para aprender.
Ten la capacidad de razonar y discernir entre maldad y error, la razón de discernir entre culpa y reparación, la razón de discernir entre hecho neutro y egocentrismo, la razón de entender que no puedes ser culpable de la ignorancia del otro que solo puede superar con esfuerzo y dedicación.
En compendio, el amor puede motivarnos a superar nuestros miedos y limitaciones, pero que nos impulsa a salir de nuestra zona de confort, a crecer como individuos y a contraponer nuestras debilidades.
Nos anima a dejar atrás viejos patrones de comportamiento y adoptar nuevas actitudes y creencias que nos permiten crecer y progresar.
Los errores no te definen, lo que te define es lo que has aprendido de ellos, siente orgullo por este aprendizaje, gracias a ello eres lo que eres, mucho mejor que ayer de cometer esos errores.
El primer paso para superar este proceso es aceptar la ingenuidad de lo sucedido y permitirnos notar todas las emociones que surgen. Es ordinario sufrir tristeza, ira, remordimiento y nostalgia, pero es fundamental no quedarnos estancados en esos sentimientos y buscar la manera de avanzar en torno a la sanación.
Por eso, al acertar los primeros pasos para “hacer las paces” y/o iniciar una nueva etapa de culpabilidad y aprendizaje en relaciones la relación, hay que hacerlo mostrando desde el minuto individualidad un interés genuino por escuchar a la otra persona y aceptar que quizás es más importante que hable ella, dependiendo de lo que exprese y del contexto en el que transcurra esa conversación.
Sin embargo, desempeñarse Ganadorí nos hace sentirnos culpables casi siempre, por multitud de cosas que solo son actos que hacemos en beneficio propio, para honrarnos a nosotros mismos, para defender nuestra esencia, nuestras deyección y nos sentimos culpables.
Equivocarse y aprender del error y seguir viviendo y seguir cometiendo errores y aprendiendo de ellos, sin culpa nunca más, buscando los errores porque a su lado hay una valiosa amonestación que, sin el error sería inútil absorber.
Hazte amigo de tus propios errores, esto es madurar, esto es ser responsable de ti, de lo que eres, eres lo que eres oportuno a tus errores y de lo que has aprendido de ellos.
La solidaridad igualmente es una manifestación del amor. Cuando amamos, nos conectamos con el hecho de que somos parte de una comunidad, y nos motivamos a colaborar y trabajar juntos para mejorarla. Sentimos la responsabilidad de contribuir al bienestar colectivo y de batallar por la Equidad social.
Una de estas acciones es el pensamiento extremo polarizado. Adentro de esta visión, ante nosotros todo o es blanco o negro, pero en raras ocasiones podemos ver que existen matices y una amplia escala de posibilidades y circunstancias.
El amor nos enseña a ser valientes, pacientes y perseverantes en la búsqueda de la felicidad y el bienestar tanto de nosotros mismos como de nuestra relación.